El 22 de Julio de 2020 en Chile, se expuso a víctimas de violencia sexual a través de un proceso legal donde esperábamos justicia para Antonia Barra, joven víctima de violencia sexual, que posterior a su ataque y debido al asedio de su atacante y el escarnio de sus amigos y ex pareja, terminó suicidándose.

Martín Pradenas no era primera vez que cometía estos actos. Aparecieron más denuncias de abuso y violencia sexual, aparecieron vídeos de la madrugada dónde arrastraba a Antonia contra su voluntad y la arrinconaba en una cerca, pero la justicia le dijo a las chilenas una vez más que las causas prescriben si no denuncian a tiempo, les dijo que si sufrieron violencia sexual pudo ser culpa de ellas, hoy la justicia una vez más nos cerró la puerta en la cara. Se acredita la violación, pero no se considera al violador como un peligro público y se le ordena resguardarse en su casa.

Pero hoy también nos levantamos todas y volvemos a gritar #elpatriarcadoesunjuez

¡No estamos solas!
¡Ante la violencia machista, autodefensa feminista! ¡Si tocan a una respondemos todas y la que quiera quemar que queme!

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